*Campesinos piden a CNA agua para regar sus cultivos.
*Ante la sequía ya se perdieron varias hectáreas y están en peligro muchas más.
Por Marisol Martínez Cruz.
Un grupo nutrido de ejidatarios de la sección 45 se reunieron en el Distrito de Riego ubicado en la colonia Iturbe, en Tula, a fin de dialogar con el representante de Conagua para pedir agua para el riego de sus cultivos que poco a poco están muriendo porque ya llevan más de 70 días que no son regadas.
Gumaro Sánchez Cuellar, presidente del Módulo de la Sección 45 El Solís, perteneciente al municipio de Tezontepec de Aldama, dijo que decidieron reunirse para hacer presión al jefe de unidad y al inspector de Conagua de la unidad de Tula del distrito 03, quienes son los que controlan la distribución de agua.
Sánchez Cuellar dijo que la sección 45 perteneciente al ejido de Tezontepec se está secando, ya tienen un promedio de 70 hectáreas pérdidas y están por perderse otras 300 más de maíz, aparte de que tienen alfalfa con 60 a 70 días sin ser regadas.
Explicó que se encuentran en esta situación debido a bajones de agua diario en la noche y no han podido avanzar, es por eso que están pidiendo auxilio porque pierden a diario y es urgente que les regulen el agua.
Solicitan que envíen a la fuerza de tarea o a la Guardia Nacional, porque el jefe de sector les dice que los huachicoleros no los dejan pasar el agua, lo que ocasiona la pérdida de los cultivos que es el sustento de los hogares.
“Si hoy no hay respuesta con el nuevo jefe de operación, el Ing. Florencio Vázquez, tomaremos otro tipo de acciones”, dijeron los campesinos, por lo que ya les prometieron recorridos para verificar la distribución de agua y valorar la situación de los cultivos, esto porque apenas fue nombrado hace cuatro días el nuevo representante de Conagua y esperan una respuesta positiva a sus necesidades.
Los ejidatarios quieren que la parte alta de Tula le deje pasar de cuatro a cinco días el agua para que puedan rescatar los cultivos que se están perdiendo, de esa manera nivelar la situación, no quieren que les quiten el agua a nadie, pero lo que ven que hay una mala distribución del vital líquido.
Por lo pronto se organizó a un grupo de 20 personas encabezados por el comisario ejidal para acudir a la ciudad de Pachuca y entablar un diálogo con el nuevo director de Conagua; mientras tanto, otro grupo afectado se quedó para hacer el recorrido en los cultivos.
“La sequía nos está agobiando y con tristeza vemos que la distribución de agua está muy mal”, dicen los campesinos
La sección 45 El Solís cuenta con 870 hectáreas de superficie, de las cuales 70 hectáreas ya están perdidas, y si no se les suministra agua se perderán otras 300 que en la actualidad están en peligro, son un promedio de 700 ejidatarios lo que se ven afectados.
La sequía está afectando a todos, también la sección 44 se está viendo en problemas y una parte del cerro del Xicuco tiene afectaciones, al menos de un 10%.
Ante el peligro latente, los campesinos necesitan por lo menos cinco días que les envíen un buen volumen de agua, “de lo perdido vamos a buscar a los culpables y vamos a pedir a Conagua que paguen las afectaciones aunque todavía no hay un análisis concreto”, dijeron. *NI*