*A excepción de las “marchantas” que podran vender todos los días de la semana.
El martes 4 de febrero las calles de Tula se vieron casi vacías de ambulantes, luego de la medida que tomaron las autoridades municipales en este sentido. Únicamente las llamadas “marchantas” se instalaron como siempre en la calle 5 de Mayo, dado que el gobierno local se los permitió, porque su mercancía son, en su mayoría, productos del campo y además la ciudadanía aboga por ellas.
Sin embargo, los demás comerciantes que ocupan las calles para sus puestos no se resignan a la medida y desde que levantaron el bloqueo de la semana anterior dejaron en claro que al no llegar a acuerdos plasmados en una minuta, insistirían en la petición de que los dejen vender todos los días de la semana.
Argumentan que no les alcanza para cubrir sus necesidades el dejar de vender un día a la semana, aunado a que de todas formas les cobran tarifas indiscriminadas, a pesar de que no siempre venden lo suficiente. Exigieron en su momento que los dejen trabajar y que no se dejen influenciar por los tianguistas que son quienes desde siempre se quejan de los ambulantes.
El mismo martes 4 los ambulantes se reunieron con autoridades municipales, donde solamente llegaron a un acuerdo, el mismo: los martes, los ambulantes semifijos del primer cuadro no trabajarán, excepto las “marchantas” vulnerables.
Este fue el acuerdo que ya existía y que se votó, debido a que no se llegó a un consenso en otros temas, a pesar de que hubo mucha discusión. Este miércoles 5, a las 9 de la mañana, José María González, el director de Reglamentos, realizará un recorrido por el primer cuadro con el padrón en mano para actualizar la información. NI