Por Magda Olguín
La política como ciencia es el arte de gobernar que trata de la organización y administración de un Estado en sus asuntos e intereses, de comunicación pública. La política real, en tanto, lucha por el poder en función de intereses y ventajas, se expresa y efectúa en el proceso de elaboración de políticas. En este sentido terminamos un 2023 lleno de política y de personajes públicos que continúan realizando trabajos rumbo al siguiente periodo electoral.
El 2024 está enmarcado por el 2 de junio con las elecciones federales de México. Un proceso en el que los mexicanos están llamados a las urnas para elegir diputados, senadores y a su presidente hasta 2030. A pesar de que las encuestas favorecen al partido en el poder, en política nada está escrito y en seis meses las cosas pueden cambiar; sin embargo, el primer cambio que debe apuntarse es el de la oposición que precisamente parece que tiene que retomar sus principios, pero con nuevos bríos para recuperar lo que en el pasado era suyo, no hay victorias eternas y parece ser que eso es algo que puede pasar por alto para los que hoy están en la cima política del país.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha desempeñado un papel fundamental en la historia política de México desde su fundación en 1929. A lo largo de los años, ha experimentado altibajos, enfrentado desafíos y buscado adaptarse a las demandas cambiantes de la sociedad mexicana. Ante las próximas elecciones, el PRI enfrenta retos significativos que requieren reflexión y acción estratégica para revitalizar su relevancia y reconectar con el electorado.
El tricolor ha sido una fuerza predominante en la política mexicana durante décadas. Sin embargo, en los últimos tiempos, ha enfrentado una disminución en su apoyo electoral. Este declive se atribuye a varios factores, incluyendo la insatisfacción pública con la corrupción, la falta de transparencia y la percepción de estancamiento en términos de propuestas y liderazgo fresco.
El Partido del que hablamos necesita reconstruir su imagen pública. Esto implica abordar de manera proactiva los problemas que históricamente han erosionado la confianza en el partido, como la corrupción y la falta de transparencia. Adoptar políticas internas más claras y transparentes, así como un compromiso firme con la rendición de cuentas, son pasos esenciales para recuperar la confianza de la ciudadanía.
También debe rejuvenecer su liderazgo y sus propuestas políticas. La incorporación de líderes jóvenes con ideas frescas y progresistas puede ayudar a atraer a votantes más jóvenes y demostrar un compromiso genuino con el cambio y la innovación. Asimismo, el partido necesita establecer una plataforma sólida que responda a las necesidades actuales de la sociedad mexicana, abordando temas como la desigualdad, la seguridad, la educación y el medio ambiente.
En un entorno político cada vez más fragmentado, el PRI puede considerar la formación de alianzas estratégicas con otros partidos afines para fortalecer su posición electoral. La colaboración con fuerzas políticas que compartan valores y objetivos comunes puede ampliar su base de apoyo y mejorar sus posibilidades en las elecciones venideras.
Fomentar la participación ciudadana y fortalecer los lazos con la base social es crucial. El PRI debe revitalizar su presencia en las comunidades, escuchar las preocupaciones de la ciudadanía y convertir esas voces en políticas y programas concretos que generen un impacto positivo en la vida de la gente.
En resumen, el PRI enfrenta el desafío de reinventarse y adaptarse a un entorno político en constante cambio. Para tener éxito en las próximas elecciones, el partido necesita abordar problemas de corrupción, renovar su liderazgo, establecer alianzas estratégicas, conectarse con la ciudadanía y proponer políticas que reflejen las necesidades y aspiraciones del pueblo mexicano. El éxito del PRI dependerá de su capacidad para transformarse y presentarse como una opción atractiva y creíble para el electorado en un contexto político cada vez más diverso y exigente.
Deseo que este 2024 sea para usted y su familia un año lleno de cosas buenas, pero sobre todo de salud y amor en su hogar, nos leemos pronto. Mis redes sociales Magda Olguín en FB y @Malenitaol en Instagram. *NI*