Por Magda Olguín
Hace unos días pasaba por la Calzada Melchor Ocampo y me percaté de que los adornos navideños no han sido retirados a pesar de que ya estamos en marzo, al respecto hice un comentario en mis redes sociales y en un par de horas fue llenado mi feed con ofensivos comentarios hacia mi persona por perfiles falsos y defensores del gobierno en turno.
Hubo uno que incluso me explicaba que ya habían dicho que no los quitaban porque ponían en riesgo a los trabajadores del municipio, ya que no había la maquinaria adecuada en ese momento, en fin, que después de borrar y bloquear a los “presuntos” les iba a contestar, pero preferí mejor hacer mi columna a este respecto.
Cuando una administración pública no puede gestionar recursos para cosas prioritarias de la ciudad, es un gobierno mediocre, e incluso falto de capacidad para administrar el presupuesto anual.
Le explico: las necesidades en la ciudad son muchas, el recurso a pesar de que pudiera decirse que es suficiente, son bastantes cosas las que apremian a ser tomadas en cuenta como prioritarias en un municipio, por lo que lo principal en un gobierno es la gestión.
“No tengo maquinaria, pero gestiono con una empresa privada el préstamo de una pluma para quitar los adornos decembrinos que se echarán a perder y dan mala imagen para las fiestas de marzo en la ciudad”, así de sencillo debe ser el pensamiento de un funcionario público eficaz y comprometido con su trabajo.
Y es que, querido lector, la gestión pública es obligatoria en cualquier nivel de gobierno, y tome nota, para elegir al candidato o candidata de su preferencia en las próximas elecciones, debe tener esas habilidades antes de pensar en un gobierno municipal. Los recursos son pocos, las necesidades muchas y la relación que se tenga con organizaciones, empresas y ciudadanía en general es básico para un buen gobierno municipal.
La gestión en la administración pública es fundamental por varias razones clave: Una gestión adecuada permite que los recursos públicos se utilicen de manera eficiente y efectiva para satisfacer las necesidades de la sociedad. Esto implica planificar, organizar, dirigir y controlar las actividades del sector público de manera que se logren los objetivos establecidos con los recursos disponibles.
La gestión eficaz implica un alto grado de transparencia en la toma de decisiones y en el uso de los fondos públicos. Esto ayuda a construir la confianza de los ciudadanos en las instituciones gubernamentales y promueve la rendición de cuentas de los funcionarios públicos.
La gestión en la administración pública asegura el cumplimiento de la ley y de las normativas establecidas, lo cual es esencial para garantizar la legalidad y legitimidad de las acciones del gobierno.
La gestión eficiente permite maximizar el uso de los recursos disponibles, minimizando el desperdicio y reduciendo los costos innecesarios. Esto es especialmente importante en un contexto donde los recursos públicos son limitados y se debe priorizar el gasto en áreas críticas como la educación, la salud y la infraestructura.
Una gestión pública efectiva fomenta la innovación y la capacidad de adaptación al cambio, permitiendo a las instituciones gubernamentales responder de manera ágil y eficiente a las nuevas demandas y desafíos que surgen en la sociedad.
Por todo lo anterior, podemos concluir que la gestión en la administración pública es esencial para garantizar el buen funcionamiento del Estado, promover el desarrollo económico y social, y satisfacer las necesidades y expectativas de los ciudadanos de manera justa y equitativa.
Tomen nota queridos funcionarios municipales y ojo que con perfiles falsos no se quita la mala imagen que ya de por sí tenemos en la ciudad con tantas obras inconclusas que, dicho sea de paso, denota la falta de planeación en los tres niveles de gobierno, pero eso lo trataremos en otra ocasión…
Mis redes sociales son: Magda Olguín en Fb y Malenitaol en Instagram. *NI*