*Lo observado por la recién instalada comisión del Ayuntamiento de Tula.
Este miércoles 25 se instaló formalmente la comisión de protección civil del Ayuntamiento de Tula, presidido por el regidor Alfonso Rodríguez Fuentes e integrado además por Noé Paredes Meza y Victorino Apodaca García. Como primera actividad realizaron un recorrido por las instalaciones de la corporación, dirigida por Eduardo Hernández Gómez.
El director de PC les mostró a Rodríguez Fuentes y a Noé Paredes las precarias instalaciones y sobre todo equipo con el que trabajan; lo que más necesitan, les dijo, es proporcionar la atención prehospitalaria, para lo cual requieren de lo imprescindible, para empezar ambulancias y material médico.
Hernández Gómez mostró el material médico que recibieron de la anterior administración y que en su opinión no era necesario, sino otro tipo de productos para la atención prehospitalaria.
Después de las instalaciones, el director de PC mostró a los dos regidores integrantes de la comisión los dos puntos críticos para el crecimiento de la afluente del río Tula. Uno de ellos a la altura del puente del Chamizal que une a San Marcos con El Carmen, por donde la Marina, a solicitud de la Conagua, realiza el desazolve y cuya maquinaria se encontró en el lugar.
A consideración del titular de PC se debería presionar aún más a Conagua porque no pueden estar tronándose los dedos, tanto ellos como la ciudadanía, cada vez que llueve, sobre todo en el Valle de México.
Otro punto visitado fue en San Lorenzo, donde ya se está desgajando el talud de tierra del río Tula y por lo cual fue necesario encostalar para evitar el derrumbe. Ahí, los munícipes hablaron brevemente con vecinos que viven en constante miedo, dado que su casa está a unos cuantos metros de la ribera y que vieron pasar la maquinaria de la empresa contratada para los trabajos por Conagua, pero ya no volvió a reforzar el área utilizada para entrar al río.
La comisión se comprometió con el área de Protección Civil a tener reuniones frecuentes, por ser prioritaria debido a la latente alarma por el río, cada vez que llueve y en consecuencia aumenta el flujo de sus aguas ahora negras y que otro tiempo fueron limpias, como recordaron los vecinos en San Lorenzo. (Por MARLENE GODÍNEZ PINEDA)